EVA BELLIDO
El derribo del complejo del Eurosol ya está en marcha. Los primeros trabajos de demolición del edificio comenzaron el viernes cuando las máquinas empezaron a tirar abajo este icono de los inicios del turismo en Benicàssim, que estaba en decadencia en los últimos años, pero seguía albergando algunos conocidos restaurantes y comercios.
Las tareas de demolición continuarán durante la próxima semana y está previsto que se extiendan posiblemente hasta mediados de diciembre.
Las primeras labores de la actuación dieron comienzo el lunes, con la retirada de todos los elementos necesarios antes de proceder al derribo y no fue hasta ayer cuando entraron las máquinas en el recinto.
Así, poco a poco, irá desapareciendo estos días la imagen de este mítico edificio, situado en la avenida Ferrandis Salvador, a primera línea de la playa Heliópolis. Son muchos los vecinos que se paran a mirar este momento histórico para la localidad.
Pero el nombre del complejo seguirá vivo. Los promotores del nuevo proyecto mantendrán el título del Eurosol para el nuevo bloque que se construirá, un atractivo edificio con espacio para una decena de restaurantes que aspira a ser todo un referente en la provincia de Castellón.
Por el momento, dejarán el espacio limpio y diáfano con un vallado perimetral que asegure la zona con el objetivo de evitar posibles ocupaciones y todo tipo de plagas.
Los nuevos dueños, que adquirieron el inmueble hace alrededor de dos años al grupo Gimeno, están a la espera de la obtención de la correspondiente licencia para poder dar inicio a los trabajos de urbanización, tras la modificación puntual del Plan de General de Ordenación Urbana (PGOU) que ha realizado el Ayuntamiento y que todavía está en periodo de exposición pública. Después, también será necesaria la licencia para la construcción del nuevo edificio, tras haber sido presentado y aprobado el correspondiente proyecto, así como el pertinente permiso de actividad. Por tanto, todavía habrá que esperar para disfrutar del nuevo complejo.