El pleno del Ayuntamiento de Benicàssim da luz verde esta semana a una moción institucional respaldada por todos los grupos políticos para exigir al Gobierno de España actuaciones urgentes en la N-340 y la AP-7. El acuerdo incluye la solicitud al Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible de ejecutar de una vez el acceso norte a la localidad, resolver la incógnita sobre el desdoblamiento de la nacional y, en caso de no llevarse a cabo, garantizar una entrada directa desde la autopista para no frenar el crecimiento de la ciudad.
La alcaldesa Susana Marqués señala que se trata de una reivindicación clave para asegurar el futuro de Benicàssim en materia de comunicaciones, mientras que el concejal de Urbanismo, Carlos Díaz, recalca que el acceso norte a la N-340 es una infraestructura pendiente desde hace décadas y que la conexión con la AP-7 es esencial para un municipio turístico que depende en gran medida de la llegada de visitantes por carretera.
Reivindicaciones sobre la movilidad y el ruido
El documento aprobado insiste también en la necesidad de reducir la contaminación acústica provocada por el tráfico de la autopista. El Ayuntamiento solicita que el Ministerio instale barreras acústicas y aplique pavimentos fonoabsorbentes en los tramos próximos a las urbanizaciones, con el fin de cumplir los niveles de calidad exigidos por la normativa.
Demandas históricas pendientes
La moción recoge además otras peticiones que el consistorio ha reiterado en numerosas ocasiones al Gobierno central, como la ampliación del puente sobre la AP-7 en la carretera de la Parreta con una pasarela ciclo-peatonal paralela, la regeneración del litoral sur, la construcción del nuevo cuartel de la Guardia Civil y la asunción por parte del Estado del coste de la desaladora.