La alcaldesa de Benicàssim, Susana Marqués, ha informado del balance de daños por el temporal que han realizado los técnicos municipales. En total y a falta de estimar lo que costaría la reposición de las grandes infraestructuras como espigones y escolleras, devolver las playas a la «normalidad» puede suponer alrededor de 300.000 euros.
Marqués ha señalado que «el fuerte temporal marítimo que azotó los siete kilómetros de costa ha dejado la playa en una situación deplorable. Ha afectado a las escolleras en las que ha arrancado parte de su estructura o la ha dañado, lo cual es importantísimo que se restaure porque estos elementos son en sí mismos una protección de la playa. Pero además ha estropeado todos los servicios que se ofrecen a los usuarios de la playa, desde duchas, lavapiés, pasarelas, canalizaciones de agua, jardinería, sombrajos y otros muchos elementos que conforman toda la infraestructura turística del municipio».
La alcaldesa ha dado orden inmediata para que las brigadas municipales comiencen ya mismo a limpiar y acondicionar la playa en la medida de sus posibilidades, pero va a ser necesario el apoyo externo para acometer los trabajos con celeridad. El ayuntamiento aprobará en el pleno de este viernes una declaración institucional solicitando a las administraciones autonómica y nacional su colaboración para la reparación de los daños. Pero además, la alcaldesa ha emprendido una agenda de reuniones para agilizar todos los temas que conciernen a la seguridad del municipio durante los episodios de temporal como el que se ha sufrido.
El informe, realizado sobre los daños en el litoral detalla que, a falta de cuantificarlos realmente en su retirada, se hace una previsión de que el mar haya depositado en la arena más de 1.200 toneladas de algas. Estos residuos vegetales no solo son un problema de salubridad, sino que además son residuos que necesitan un tratamiento especial en su retirada, con lo cual, el coste de la retirada y proceso de gestión, supondrá por sí solo más de 170.000 euros.
Además, como se describe en el informe técnico, las infraestructuras sanitarias de la playa han sufrido fuertemente el temporal. Los pozos drenantes de las duchas se han colmatado de arena y deben desmontarse, limpiarse y volverse a colocar. Las estaciones de bombeo han sufrido averías, algunos lavapiés incluso se han desplazado de su ubicación. Las líneas de suministro de agua se han quedado al descubierto y se han desplazado de su ubicación. E igualmente, todas las salidas de aguas pluviales se han anegado de arena y residuos, lo que va a hacer necesaria una limpieza en profundidad para dejarlas de nuevo al cien por cien de rendimiento.
De hecho en la desembocadura del barranco de Farja, el arrastre de piedras ha destrozado las canalizaciones que permanecían enterradas y, al mismo tiempo ha soterrado completamente la pasarela de madera que salva el desnivel para uso ciudadano.
Además, la estructura de paseo de la playa, es decir las pasarelas de madera o las nuevas de hormigón se ha visto muy afectada. Según puntualiza el informe técnico, el 80% de las pasarelas se ha dañado o ha desparecido arrastrada por el temporal. Tanto es así que los técnicos adelantan que prácticamente será como configurar toda la playa desde cero otra vez.
Otro de los grandes problemas de las playas de Benicàssim ha sido la erosión que ha sufrido. Principalmente la mayor afección se da en la playa de Heliopolis, donde el mar ha arrastrado grandes cantidades de arena, lo que hará necesario hacer un acopio de arena para devolver a la costa su esplendor.
Por último, otra de las facetas en las que la playa ha sufrido más es la parte ambiental, ya que todo el arbolado que se ubicaba en la playa se ha deteriorado.
En total una veintena de ejemplares de palmeras que se encontraban en la playa se han visto afectadas, bien por arranque o bien porque sus cepellones han quedado descubiertos y expuestos al agua marina. Lo mismo sucede con los eucaliptus de la playa de Heliopolis que han visto como se fracturaban ramas en muchos de ellos desgajándose del tronco.
Me pongo en contacto con ustedes por si a traves de este medio podemos encontrar una solución o al menos hacerlo público.
Soy un vecino de la calle Manuel de Falla en la zona situada en la cuadra Santiago.
Desde hace 30 años nuestra propiedad está catalogada como suelo urbano en una isla sin urbanizar. Sin embargo, carecemos de servicio de alcatarillado, aceras, alumbrado público en condiciones, un asfaltado adecuado y sobre todo algún sistema de retención de aguas pluviales.
Cada vez que llueve los vecinos de esta calle estamos atemorizados por inundaciones en garajes y sotanos. Al no tener alcantarillado los vecinos nos vemos en la necesidad de tener que sacar el agua a la calle a traves de nuestras propias bombas. Esto esta agravado porque nuestras propiedades están situadas en la zona más baja de la cuadra de Santiago sin un drenaje de aguas adecuado, cerrando el paso las edificaciones de primera línea que se construyeron con posterioridad a las viviendas de la calle Manuel de Falla.
Por más que nos hemos quejado al Ayuntamiento nos comunican que el problema es de la Conselleria, que ellos deben tomar una solución con las marismas de en frente de la hípica y el encauce del barranco de la Parreta.
Según los técnicos del Ayuntamiento, hasta que esto no se solucione nosotros no tenemos la posibilidad de finalizar los elementos necesarios para que este suelo urbano este definitivamente urbanizado.
Nosotros lo que queremos es una solución al problema de acumulacion de agua en nuestras propiedades y alrededores.
Muchas gracias
Estimado lector, nos constan esos problemas de inundabilidad en la zona del Cuadro de Santiago. Y hemos publicado varios artículos sobre la problemática. No obstante, y a raíz de su comentario, escribiremos una nueva noticia sobre ello para darle mayor difusión y ayudarle a reivindicar a las instituciones una solución.
Muchas gracias por seguirnos y participar en este periódico.
Un saludo