Concienciar sobre igualdad de sexos y educar en valores para prevenir la violencia de género y frenarla. Ése es el objetivo que se ha marcado el Ayuntamiento de Benicàssim, a través de la Concejalía de Igualdad, para acabar con la violencia contra las mujeres.
Y así lo están aprendiendo los jóvenes de la localidad, que participaron este sábado en la primera acción de la nueva campaña Todos los 25 son 25 de noviembre, que traerá iniciativas de este tipo cada día 25 de cada mes.
Las acciones abarcan todas las áreas del consistorio, que están adaptando proyectos para visibilizar esta lucha contra la violencia y promocionar las herramientas y servicios que las víctimas y la sociedad tienen para combatir esta lacra. En este caso, un taller gratuito de tatuajes y pintura corporal en el Casal Jove, promovido por la Concejalía de Juventud, concienció de una forma original muy divertida a los adolescentes.
Los jóvenes se divirtieron haciéndose tatuajes con henna, que aunque después desaparecerán, “es una manera de defender nuestros principios de igualdad de sexos y valores”, explicaron desde la organización.
Los asistentes reflexionaron sobre los motivos que subyacen en la violencia de género con la idea de que “los valores y las señales que cada uno tenemos y que queremos que profundicen en nuestras vidas, las tengamos tan interiorizadas que seamos capaces de grabárnoslas en la piel”, según señalaron.
La puesta en marcha de esta campaña se aprobó en el pleno del pasado mes de febrero para reforzar las herramientas de lucha contra la violencia de género.
“Como sociedad no podemos resignarnos a que esta forma de violencia se instale en nuestro entorno. Por eso, debemos mantener vivo el compromiso de luchar contra ella. Desde luego, con todas las herramientas que nos aportan los cuerpos de seguridad, la justicia, los sistemas de detección social, de salud, de educación”, destacó la concejala de Igualdad, Vanessa Batalla.
Quien añadió que también “como ciudadanos podemos trabajar por combatirla. No olvidando a las víctimas, no aceptando actitudes, no dejando pasar la oportunidad de mostrar nuestra repulsa. Por eso, queremos que no solo una vez al año tomemos la calle para demostrar que en Benicàssim no hay sitio para la violencia, sino que queremos hacerlo todo el año”.