Eva Bellido // Benicàssim
El pleno extraordinario celebrado este lunes en Benicàssim aprobó el proyecto de expropiación de los terrenos dotacionales del recinto de conciertos de los festivales por tasación conjunta.
Se trata del área perteneciente a los dos planes especiales aprobados, una superficie que suma alrededor de 130.000 m2 y que ha sido valorada por 1.941.588 euros, según explica el concejal de Urbanismo, Carlos Díaz.
A finales del 2018 el Ayuntamiento aprobó el pliego de condiciones del concurso para la obtención de un préstamo bancario de 3,6 millones de euros para la adquisición definitiva del suelo del recinto.
Y es que el consistorio también está dispuesto a comprar, aparte de las parcelas que se encuentran dentro de los planes especiales (del 98 y 2007) y que es susceptible de ser expropiada, el resto de terrenos próximos, que suman alrededor de 100.000 m2 más; y así se lo ofrecerá también a los propietarios.
Estudios previos
Díaz considera que el justiprecio está “bien valorado”. Para determinar la cuantía se encargaron dos estudios por vías distintas, según recordó. “Por un lado, uno agrícola, ya que estos terrenos están calificados como rústicos, un ingeniero agrónomo realizó una valoración teniendo en cuenta el mejor cultivo posible, que, en este caso, ha sido el naranjo clementino”.
Y, por otro, la capitalización de rentas referente a las actividades que se realizan en el recinto de festivales. Para ello, se han tomado las distintas cuentas anuales de las sociedades que allí explotan el recinto, se han obtenido los beneficios netos y se han capitalizado. “Y por esta vía da un precio más elevado y es el que se ha escogido”, afirma.
Los terrenos incluidos en los planes especiales “son los que tienen el uso dotacional público para la realización de festivales y otras actividades y es lo que nos da la causa expropiandi, para obtener estos terrenos por su función y uso público”, explica Díaz.
El proyecto se expone ahora al público y se notificará individualmente a cada propietario con una ficha con todos los detalles. Los afectados tendrán un mes para la presentación de alegaciones. Después el Ayuntamiento resolverá, atendiendo favorablemente las que se consideren oportunas.
A partir de ese momento se citará un acta de ocupación y pago y serán cuando las parcelas pasen a ser de titularidad municipal. No obstante, los propietarios que no están de acuerdo también podrán recurrir por otras vías.
Para verano
Con todo, el Ayuntamiento espera tener la disposición del suelo de los festivales para el verano, antes de la celebración del FIB y del Rototom.
Para el Sansan, que se celebra en abril, todavía está en vigor el contrato anual de alquiler que se firmó el pasado año, aclara el concejal.
Tras la aprobación en el pleno de este lunes–punto que contó con el apoyo del PP, ARB, Ciudadanos y PSPV, en contra de Compromís y Ara– ya se iniciaron las primeras reuniones con algunos dueños y seguirán, con el fin de trasladarles la información, independientemente de que también la recibirán por notificación oficial.
Por su parte, la alcaldesa, Susana Marqués, remarca que con este acuerdo continúa adelante el importante procedimiento de conseguir un recinto de festivales público en el que poder invertir en infraestructuras y acondicionarlo para apostar por liderar el sector del atractivo turístico de grandes eventos que se acomoden en nuestra ciudad y que durante todo el año, y no solo en verano, posibiliten la generación de actividad. Los festivales suponen más de 2.000 puestos de trabajo y una repercusión económica de varios millones de euros”.