El reconocido economista austriaco Christian Felber, ideólogo de la Economía del bien común y profesor de la Universidad de Viena, explicó su modelo alternativo en su comparecencia en el Foro Social del Rototom Sunsplash.
Felber habló de su sistema propuesto junto a Rafael Climent, alcalde de Muro d’Alcoi; y Rafael Pallarés, propietario del hotel Voramar de Benicàssim, ambos pioneros en la región en aplicar o seguir las líneas de esta forma de trabajar o gestionar en una empresa o consistorio.
El economista resaltó que el modelo busca poner como objetivo económico los valores compartidos entre los seres humanos y que ya están recogidos en muchas constituciones: “la dignidad, la justicia, la solidaridad, la sostenibilidad y la democracia”. Para implementar este nuevo sistema las compañías deben “dejar de medir el éxito por los beneficios económicos, que deberían ser el medio, no el fin”.
Y destacó que, además, las empresas que aplican esta economía “obtienen ventajas, como pagar menos impuestos, la obtención de créditos en condiciones más favorables, entre otras”.
Pallarés desgranó, por su parte, el modelo aplicado en Voramar, similar a este planteamiento, como las “huertas ecológicas que tenemos para autosuministrarnos y dar trabajo local y devolver lo que nos da el municipio, destinar siempre una parte de los beneficios a causas de oenegés, tanto más globales como locales, métodos de ahorro de energía o no vender especies en peligro de extinción”, entre otras.
El movimiento se articula a nivel “empresarial-económico, político-democrático y cultural-educativo, con decenas de universidades –incluidas algunas españolas- que están impartiendo e investigando la Economía del bien común. “En sólo dos años y medio que se está el sistema; cada día tenemos una cola más larga de municipios, ciudades y regiones enteras que se quieren implicar”. Quien también destacó la importancia de que sea un modelo “de abajo a arriba”, a través de un proceso democrático asambleario y descentralizado, que tiene como motor la participación ciudadana.
Ya hay 1.319 empresas de 22 países apoyando el progreso, según indicó. En España, “un total de 300 compañías están interesadas; 125, han empezado; y 15, han hecho ya el primer balance”, anunció. Y en octubre se fundará la asociación española para fomentar esta economía.