Eva Bellido // Benicàssim
El pleno ordinario del Ayuntamiento de Benicàssim de noviembre aprobó iniciar la suspensión del PAI Benicàssim Golf, 22 años después de la presentación del proyecto urbanístico, el 27 de julio de 1998, en el que se preveía la construcción de tres hoteles, un campo de juego y 3.000 viviendas.
De esta forma, el consistorio dio luz verde a resolver tanto el propio programa como la condición de agente urbanizador a la mercantil Benicasim Golf, SA. La tramitación se realiza a solicitud del promotor, que esgrime como causa de ello el haber transcurrido el plazo legal desde que se decretó la suspensión de las obras.
La justificación en la que se basa el Ayuntamiento para comenzar este proceso se fundamenta en la imposibilidad, asumida por el mismo urbanizador, de ejecutar la actuación hasta no contar con una solución hidráulica para los tres sectores del PAI, al tratarse de una zona inundable.
Asimismo, la declaración del humedal del Cuadro de Santiago como zona de especial protección hizo incompatible el proyecto de canalización del barranco de la Parreta. Actualmente, hay otra alternativa, que pasa por la creación de un lago laminador y diques, pero aún tiene que materializarse.
También es razón resolutoria el no poder continuar con el proyecto por las circunstancias sobrevenidas, consecuencia de las modificaciones que, por cuestiones medioambientales, afecta al ámbito inicialmente homologado.
El concejal de Urbanismo, Carlos Díaz, explica que la «sentencia del Tribunal Supremo –hace 10 años– que declaraba nulo el plan parcial de mejora, y el proceso de inclusión en el catálogo de zonas húmedas, ha sacado del plan una superficie aproximada de 790.000 m2, que iban destinados a parque público y campo de golf».
Próximos pasos
A pesar de haberse diseñado una nueva solución a la inundabilidad de la zona sur, «basada en el estudio proyectado por la Confederación Hidrográfica del Júcar, quedan muchas incógnitas por resolver», señala el edil, quien añade que, en primer lugar, la Generalitat «debe finalizar la catalogación del humedal, puesto que la delimitación actual es, por ahora, tan solo una propuesta».
Además, se estudiará una nueva homologación para los terrenos del sector tres, una vez se reclasifiquen como rústicos y protegidos los suelos del Cuadro de Santiago.
Y, por otra parte, hay que realizar una nueva programación, «bien por parte de los propietarios de los terrenos constituidos en agrupación de interés urbanístico, o a través de un nuevo agente urbanizador», apunta.
El punto fue aprobado por los votos a favor del equipo de gobierno y la abstención de la oposición. Ahora se abre un plazo de un mes de exposición pública para alegaciones.