URBANISMO Infraestructura deportiva
E. BELLIDO // BENICÀSSIM
Los puntos relacionados con la aprobación de las partidas de la piscina de Benicàssim se quedaron este viernes finalmente sobre la mesa en el pleno ordinario celebrado en el consistorio, con el objetivo de “adoptar la resolución más adecuada para que el Ayuntamiento no se vea perjudicado”, según explicó la alcaldesa, Susana Marqués.
Y es que la entrada de la ex concesionaria Renos en concurso de acreedores este martes, tal y como fue publicado oficialmente en el BOP, –que cerró las instalaciones el pasado 1 de septiembre del 2012 alegando falta de rentabilidad– “cambia completamente las circunstancias y hay que garantizar que esta nueva situación no afecte a los intereses del consistorio e intentar que el Ayuntamiento no pague nada hasta que tenga garantías de recibir también los ingresos”, indicó la primera edil.
Por eso, el equipo de gobierno ha solicitado un informe técnico y jurídico para saber qué pasos dar. Después, la empresa tendrá un periodo de 10 días de alegaciones y otros tantos los técnicos municipales para resolverlas. Marqués ha convocado una mesa técnica para el próximo día 28 de octubre con los componentes de las comisiones, del gabinete jurídico, económico, tesorería y recaudación, en la que se prevé ya tener los pasos a seguir claros.
Y es que el Ayuntamiento tiene de plazo un mes para presentar su deuda con la compañía y personarse en el juzgado como acreedor, exactamente deberá hacer el próximo 2 de noviembre, por lo que para esas fechas deberán estar las cantidades cuantificadas.
Por un lado, el pleno de este viernes se disponía a aprobar la “desestimación de alegaciones y aprobación de la liquidación de la indemnización de los daños y perjuicios, cuantificados en 4,2 millones de euros, ocasionados por la resolución del contrato de concesión de la instalación deportiva, que era de 25 años y finalmente ha vencido en cuatro, que quedó sobre la mesa con los votos a favor del PP y la abstención del PSPV, EU, Bloc y la concejala Inma Mas.
Y, por otro, la aprobación de la factura presentada por Renos de la amortización pendiente de la obra de la piscina, valorada en 1,2 millones de euros para el abono de la reversión de las inversiones realizadas, que todos los grupos dieron su voto para dejarlo sobre la mesa (PP, PSPV y EU), con ausencia del concejal del Bloc, Domingo Ferrando, alegando incompatibilidad.
Marqués criticó después la actitud de Ferrando que, tras el pleno, “ha intentado frenar la mesa de contratación de la piscina para paralizar una demanda tan reivindicada por la ciudadanía”.
Dos mociones presentadas por grupos de la oposición no salieron adelante, como la del PSPV, alegando la munícipe no ser posible legalmente la vía de la compensación; y la de EU, tildándolo Marqués de “oportunismo político, al estar ya trabajando el equipo de gobierno en esa línea de pedir un estudio urgente legal”.
Tres empresas optan a la nueva concesión de la piscina
Un total de tres empresas optan a la nueva concesión de la piscina municipal, cuyo periodo de licitación pública concluyó ayer. Unos pliegos que han velado por “garantizar la rentabilidad del negocio”, según han mostrado desde el consistorio, incluyendo la explotación de nuevos servicios complementarios como una cafetería y un gimnasio, además de otorgar el Ayuntamiento una media de 200.000 euros anuales a la nueva compañía que gestione la piscina con el objetivo de evitar un próximo cierre y cese del servicio, con un nuevo contrato a 20 años vista.
Así, si el procedimiento transcurre con normalidad y se presenta toda la documentación necesaria, la piscina “podría estar licitada a final de año, comenzar las obras del gimnasio y cafetería a principios del 2014 y abrirse de cara a Pascua”. Y es que, según explica Marqués, los expertos indican que las mejores temporadas de apertura son al inicio del curso escolar en septiembre o en abril hacia la primavera.