URBANISMO Obras
E. BELLIDO // BENICÀSSIM
El Ayuntamiento de Benicàssim está procediendo a la renovación de diversas barandillas o a la instalación de algunas nuevas en varias zonas peatonales o de tránsito del municipio con estructuras más modernas y seguras, según informaron desde el consistorio. El proyecto prevé una inversión de alrededor de 24.000 euros y podría estar concluido ya en las próximas semanas. La medida persigue “mejorar la seguridad tanto de vehículos como de peatones a su paso por zonas con riesgo, o bien por el tráfico, por la altura sobre el cauce del barranco, como sucede al final de la avenida Santo Tomás”, según explicó el concejal de Obras, Clemente Martín. “Queremos que los ciudadanos tengan la tranquilidad de que al circular por nuestras calles se les protege de cualquier incidente que pudiera suceder”, incidió el edil.
En la actualidad, se han colocado ya las barandillas situadas al final de la avenida Barcelona, junto al hotel Voramar, que protege a los viandantes de la circulación. Y también se ha instalado la que flanquea el paso de la avenida Castellón con el barranco de Farja y que permite salvaguardar al tráfico y al viandante de una caída de más de dos metros al lecho del cauce.
Además, se han renovado en dos nuevos tramos en la zona de la calle Ausias March, resguardando, por un lado, el acceso a un nudo de aliviaderos de aguas pluviales confluyente con la calle La Comba y, por otro lado, un paso estrecho también de desagüe de aguas de lluvia que atraviesa subterráneamente el terraplén de la N-340, evitando así cualquier accidente ocasional.