CULTURA Festivales de Música
El extraordinario pianista Enma Fernández despide Benicàssim Blues Festival
E. BELLIDO // BENICÀSSIM
Las actuaciones de Veronica&The Red Wine Serenaders y Enma Fernandez Band despidieron este domingo por la tarde el V Benicàssim Blues Festival desde el escenario B Sound B instalado en el paseo de la playa Torre Sant Vicent, en un marco idílico frente al mar. Fueron los italianos los primeros en poner el ritmo con su género ‘americana roots’ con la utilización de instrumentos acústicos como ukeleles, contrabajo o guitarras…, dentro de la promoción de su sexto álbum The Mexican Dress, grabado en Estados Unidos e Italia. Su reconocimiento está avalado, además, por el European Blues Challenge, que lo ganaron en 2013 cuando se celebró en Toulouse (Francia).
Después, fue el turno del pianista, cantante y director, Enma Fernandez Band, afincado en Barcelona con una intensa trayectoria sobre los escenarios que quedó evidente ayer en Benicàssim. El pianista, en la parte final de la actuación, demostró su extraordinaria habilidad con las teclas tocando de espaldas subido encima del piano, lo que hizo alucinar al público, que disfrutó mucho también del espectáculo y del talento de los músicos de esta formación El público disfrutó del rhythm and blues, swing, jazz tradicional y rock’n’roll de la formación con temas de artistas de los 40’s y los 50’s.
Antes, durante esta última jornada también se desarrollaron otras actividades como talleres infantiles y másterclass por la mañana, así como música en directo con los vermut&blues celebrados en varios locales del casco urbano. El programa también contempló una exhibición de claqué y Lindy Hop con la academia Castellón Baila, en la plaza Constitución; y tardeo con Corto Maltés&Bárbara Breva, por la tarde en la playa.
El gran momentazo del festival se vivió la noche del sábado, con los pesos pesados de este año, que no dejaron indiferente a nadie y cumplieron todas las expectativas. El público se rindió ante el extraordinario dominio de las cuerdas del guitarrista británico Laurence Jones, disfrutando tremendamente del espectáculo; y se encariñó del gran Sugaray Rayford, que se entregó compartiendo escenario con la Travellin’Brothers (Bilbao). Sugaray, recién llegado desde Arizona para su actuación en Benicàssim, conquistó a los miles de amantes del blues congregados en la plaza Estación con su voz, movimiento de caderas e, incluso, cantando mezclado entre el numeroso público.