Las obras para la creación de la nueva zona de ocio para actividades culturales, deportivas y de hostelería, anunciada hace un año, en el sector Pontazgo de Benicàssim, junto al carril bici de entrada a la Vía Verde y frente al Palasiet, han empezado. El Ayuntamiento concedió la licencia de obra “recientemente, hace aproximadamente dos semanas”, según explicó el concejal de Urbanismo, Carlos Díaz, y las máquinas ya están trabajando en la zona.
El nuevo edil de Urbanismo también informó que se instalará “una zona con aparcabicis y otra ajardinada en frente de la fachada, en la parte de la vía verde, además de las obras internas para adaptar el local”. Quien señaló que la intención de la empresa es que “este próximo verano esté en funcionamiento”.
El proyecto abarca una superficie de 461 m2. La actuación pretende acondicionar una planta baja existente para su utilización para los fines de ocio y culturales que pretenden dinamizar esta zona norte del municipio.
El espacio se encuentra en la calle Pontazgo, donde se encuentran actualmente unos antiguos inmuebles en desuso. Díaz indicó que, “como no tienen vistas al mar, porque tienen delante el antiguo andén del apeadero, solicitan permiso para desmontarlo y tener vistas al mar”. “Con lo que desaparecerá el terraplén, pero no lo que queda del apeadero”, apuntó.
Parece que, con ésta y otras iniciativas, este privilegiado sector, situado junto a la playa del Voramar con unas increíbles vistas de toda la costa, comenzará a cobrar vida. Y es que también hay otro proyecto en marcha. El Ayuntamiento tiene previsto licitar un quiosco-cafetería en la parcela dels Canons, ubicada justo en la entrada de la Vía Verde, a primera línea de mar.
Un concurso de ideas con el Colegio de Arquitectos de Castellón ayudará a definir el desarrollo de la privilegiada parcela municipal en la que el consistorio quiere promover esta zona lúdica con vistas al mar. Uno de los requisitos será que el diseño permita incorporar la construcción y dotación de este quiosco de servicios, que deberá quedar integrado en el paisaje y el proyecto deberá adaptarse al valioso entorno ambiental.
El solar está rodeado por el antiguo muro de contención del siglo XIX y es donde antiguamente se encontraba la caseta del guardagujas de la vía del ferrocarril.
La iniciativa responde a una demanda de los usuarios de la vía verde, de tener un quiosco de servicios y zona de esparcimiento junto a este itinerario peatonal que es utilizado por miles de personas a lo largo de todo el año y que es un referente turístico de Benicàssim. Aparte de poder convertirse en uno de los lugares más emblemáticos y con mejores vistas de la localidad.