Redacción // Benicàssim
Benicàssim ya cuenta con un nueva conexión con Castellón con la apertura de la prolongación de la CV-149.
Una vez concluida la actuación, el Ayuntamiento de Benicàssim ha firmado este viernes el acta de recepción de las obras «cumpliendo uno de los compromisos que adquirimos con los vecinos de Benicàssim».
Esto «va a suponer una clara mejora en la accesibilidad, la seguridad vial y movilidad en Benicàssim, especialmente para los residentes en la zona sur y en las urbanizaciones de montaña», ha indicado la alcaldesa, Susana Marqués.
La primera edil ha recordado que «estamos muy orgullosos de que esta infraestructura, además de demandada y necesaria para la ciudad, sea sostenible, pues en su diseño y construcción se han reutilizado materiales preexistentes, reduciendo así la huella de carbono en su ejecución».
«Ciudad más sostenible»
En este sentido, «el ahorro de emisiones refuerza nuestro compromiso por una ciudad más sostenible, apostando por la conservación de nuestro entorno».
Susana Marqués ha visitado la actuación realizada junto a miembros del equipo de gobierno, técnicos municipales, el interventor municipal y representantes de la empresa adjudicataria.
Tras la signatura del acta de recepción de las obras, se ha procedido a la apertura del vial, «y este mismo fin de semana, que vamos a aumentar de forma considerable el número de visitantes con motivo de la celebración del SanSan Festival y el puente de Todos los Santos, se podrá utilizar esta nueva vía de comunicación para acceder a la avenida Mohíno», ha indicado el concejal de Movilidad y Urbanismo, Carlos Díaz.
La prolongación de la autovía, que será especialmente útil para los vecinos de la zona sur y de urbanizaciones, tiene una extensión de unos 620 metros, cuenta con cuatro carriles (dos por sentido), un carril bici, y conecta la conocida como rotonda de la Paella con la avenida Mohíno.
Reducción de 297 toneladas de CO2
Las obras de prolongación de la CV-149 destacan por su apuesta por la sostenibilidad ya que ha permitido a Benicàssim ampliar su huella verde al reducir 297 toneladas de CO2.
Este dato se ha extraído del estudio realizado por la empresa adjudicataria en cuanto a la disminución de la huella de carbono, comparando las emisiones producidas entre la solución que ha ejecutado el Ayuntamiento, mediante la reutilización de áridos existentes, y los métodos tradicionales.
En este estudio se han contemplado las emisiones que se produjeron debido al transporte (tanto de tierras existentes a vertedero como de suministro de suelo seleccionado de préstamo, zahorra artificial de cantera y mezclas bituminosas), las emisiones producidas en la producción de estos materiales y su posterior puesta en obra.
«Nuestro compromiso con el medio ambiente nos lleva a implementar acciones a diario para mitigar los efectos del cambio climático. Esta acción es un paso más en nuestra estrategia para alcanzar los objetivos a los que nos comprometimos al adherirnos a la Red de Entidades Locales para la Agenda 2030 y en el cumplimiento de Objetivos de Desarrollo Sostenible», ha finalizado la alcaldesa.