Eva Bellido // Benicàssim
Benicàssim estudia la aplicación de medidas que puedan contribuir a controlar la proliferación de jabalíes en zonas urbanas de la localidad costera. Para ello, representantes del Ayuntamiento mantuvieron una reunión con responsables de la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica con el objetivo de analizar la situación y llevar adelante un plan especial.
Así, la intención pasa por asegurar «el control del jabalí para mejorar la biodiversidad, hacer un estudio de la densidad para saber si está dentro de los parámetros normales y mejorar la seguridad en zonas urbanas», según explicaron fuentes municipales.
La concejala de Medio Ambiente, Vanessa Batalla, destacó que «era necesaria esta primera toma de contacto para analizar la situación, ya que todos conocemos los riesgos que suponen cuando se acercan a las zonas urbanas. Esperaremos a los resultados de los estudios que realizarán desde Conselleria para poder establecer un protocolo de actuación», remarcó la edila de Medio Ambiente.
Incidentes
La proliferación de jabalíes en localidades como Benicàssim está conllevando riesgo para la seguridad vial en los últimos años. Y es que en ocasiones cruzan carreteras, mientras bajan del Desert de les Palmes en busca de agua y comida, y han estado a punto de provocar accidentes, como han denunciado numerosos vecinos que suelen circular por la CV-149. Por este transitado vial es frecuente ver a familias de estos animales pasar para llegar hasta las zonas urbanas, con el peligro que conlleva al tratarse de una autovía con dos carriles de circulación para cada sentido, con velocidades que pueden alcanzar los 100 km/hora en algunos tramos.
Otros ciudadanos han alertado también de la problemática que padecen en sus huertas y campos, con destrozos y y cosechas echadas a perder. Mientras, en las zonas más pobladas también se han dejado ver cada vez con mayor frecuencia. Recientemente, unos vecinos advirtieron de varios de estos ejemplares que se encontraban caminando cerca de lugares como la Escuela Infantil Municipal Doloretes, con niños de 0 a 3 años, cerca del casco urbano.
También llama la atención que ya se acercan incluso a terrazas de restaurantes en busca de comida. Por lo que las autoridades piden un plan urgente de actuación.