Redacción // Benicàssim
La concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Benicàssim se encuentra inmersa en la redacción del Plan Local de Prevención de Incendios Forestales.
Con este plan, el consistorio tiene el objetivo de asentar, con mayores recursos y herramientas, las bases de una prevención de incendios forestales.
La concejala de Medio Ambiente, Elena Llobell, el técnico del área Jesús Albuixech, y el representante de la empresa Medi XXI, contratista de la asistencia técnica, se han reunido esta semana para hacer un seguimiento a la redacción del proyecto con el que “el ayuntamiento contará con un importante pilar para garantizar el entorno natural del término municipal de Benicàssim”, ha explicado Elena Llobell.
Benicàssim cuenta con más de 2.000 hectáreas y el plan, cuya redacción está previsto que finalice en noviembre, se adaptará a la realidad física del municipio y establecerá las medidas generales de prevención y defensa de los terrenos forestales.
“El plan se centra en el suelo forestal pero también se van a contemplar posibles acciones en zonas donde hay vegetación como puede ser el Cuadro de Santiago así como en urbanizaciones de montaña”, ha añadido la edil de Medio Ambiente quien ha incidido en que con el nuevo plan “tendremos más seguridad a la hora de atajar cualquier incendio”.
A la redacción del Plan Local de Prevención de Incendios Forestales se suma la actualización del plan de quemas en el término municipal. Además, desde el área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Benicàssim también se realizan actuaciones encaminadas a la prevención de incendios forestales en el perímetro de las urbanizaciones de montaña del municipio.
El proyecto de prevención de incendios forestales consiste en trabajos para mitigar el riesgo de incendios, mediante el tratamiento de la vegetación en las zonas del interfaz urbano-forestal del municipio, y concretamente en la zona de las urbanizaciones de Montornés, La Parreta, Las Palmas, Montemolino y otras zonas sensibles a la aplicación de las actuaciones. Por último, los trabajos de desbroce que también se realizan de forma continua ayudan a mitigar los posibles riesgos de incendio.