SOCIEDAD Medio Ambiente
Benicàssim crea una ruta botánica en el parque del Trenet con 20 placas identificativas de especies
E. BELLIDO // BENICÀSSIM
El parque del Trenet de Benicàssim cuenta ahora con una ruta botánica compuesta por 20 placas identificativas de especies para los visitantes del jardín, tras concluirse el proyecto de señalización de este itinerario. El público puede así observar las especies vegetales más importantes del parque y conocer tanto sus nombres comunes como científicos.
Además, dentro de la información que ofrece la señalización se incluye también un código QR mediante el cual, a través de cualquier teléfono móvil inteligente, se puede ahondar en la información sobre el origen, la procedencia e imágenes de las existentes en este parque, según informaron ayer desde el consistorio.
La alcaldesa de la localidad, Susana Marqués, visitó el que es el mayor parque público de Benicàssim, junto al concejal de Medio Ambiente, Clemente Martín; y el técnico municipal del área, para visitar la finalización de esta actuación.
“Estamos haciendo una programación de mejoras ambientales que van dirigidas a conseguir que los parques y jardines de la ciudad se vivan más intensamente por los vecinos”, destacó Marqués. “Queremos que estos parques sean un verdadero punto de encuentro de los benicenses y que puedan disfrutar tanto del entorno como de la mejor calidad de sus servicios”, añadió.
La nueva ruta turística ambiental da un valor añadido además a esta conocidísima plaza del municipio, donde cada fin de semana decenas de familias se dan cita para jugar con los más pequeños y subir a los trenes en miniatura que circulan gracias a la Asociación del Ferrocarril de Farja, que se encarga del mantenimiento durante todo el año.
En la zona de la pequeña estación comenzarán “en breve” las obras de colocación de la cubierta, según señalaron desde el Ayuntamiento. Un voladizo que protegerá y cubrirá la frontal de la playa de vías miniatura del recinto y que sirve de apeadero para los usuarios del pequeño recorrido.
Martí apuntó, por su parte, que se trata de los primeros parques donde se ha comenzado a utilizar el corte del césped tapizante de manera ecológica con un microtriturado de los restos que permite que la propia materia vegetal recortada se convierta en abono del jardín de una manera natural y sostenible.