Eva Bellido // Benicàssim
El asistente del Rototom Sunsplash cuya desaparición habían denunciado sus amigos, Buburuz Radu Tiberiu, natural de Rumanía, de 38 años y vecino de Barcelona, «ha aparecido», según ha comunicado a este periódico Yass Elouarari, el amigo que presentó la denuncia en el cuartel de la Guardia Civil de Benicàssim este lunes. «Está en Barcelona, se fue caminando sin avisar, nos lo ha comunicado», según relata.
Desde el Consorcio de Bomberos de Castellón también han confirmado su aparición sano y salvo. Los amigos de Buburuz han querido agradecer su rápida respuesta, pues ya estaban activados los grupos de búsqueda con perros de protección canina de Castellón.
Yass Elouarari, natural de Marruecos, presentó este lunes una denuncia en el cuartel de la Guardia Civil de Benicàssim por la desaparición de Buburuz Radu Tiberiu, natural de Rumanía, amigo suyo de 38 años con el que se encontraba disfrutando del festival reggae en Benicàssim y que dejó de ver la última noche del evento.
Buburuz se alojó durante toda la semana en el cámping B habilitado por la organización del Rototom en una tienda de campaña, junto a la de su amigo y la novia de éste. También se sumó otro amigo a mitad de festival. Todos son vecinos de Barcelona y se habían trasladado por el festival.
Yass ha explicado que el sábado disfrutaron del festival, como cada día, y que volvieron ellos dos hacia el cámping para dormir en torno a las 06.45 horas, porque Buburuz «estaba ya cansado». Cuando cruzaron el puente de la autopista que hay justo antes de la entrada de la zona de acampada, se pararon y se sumaron «a un grupo de asistentes que estaban dando golpes en la barandilla como despedida del festival». «Bueno, solo yo», aclara, «Buburuz se quedó detrás». «Al rato cuando me giré no lo vi. Como estábamos a escasos metros de la entrada del cámping di por hecho que se habría ido a su tienda a dormir y yo me fui a la mía». «Cuando nos despertamos, desayunamos y al ver que no salía sobre las 14.00 horas con el calor, miramos y no estaba dentro de la tienda. Pensamos que igual había conocido alguna chica la noche anterior y se fue a su tienda».
«Empezamos a recoger», pues a las 17.00 horas cerraba sus puertas el cámping de la organización, «le llamamos pero no cogía el teléfono, aunque sí daba tono». «Volvimos a llamarle sobre las 16.00 horas y ya no daba señal y estaba apagado. Entonces nos movilizamos y le llamaron por megafonía tres veces, también contactamos con policía y hospitales por si le había pasado algo, pero nada», ha recordado.
«Bajamos a la playa, pero no lo encontramos tampoco. Buscamos por todo el pueblo, no estaba en nigún bar».»Estuvimos esperando a ver si nos llamaba o sabíamos algo. Y el lunes fuimos a poner la denuncia».
Sus amigos no creían que se hubiera ido sin avisar. «Vino con nosotros en la furgoneta desde Barcelona y no tenía dinero ni cartera ni nada, dejamos toda la documentación en la furgoneta, por si nos robaban en la tienda de campaña, porque ha habido robos».
A lo largo de la jornada de este lunes estuvieron buscándole también sus amigos por la zona donde desapareció de nuevo y comenzaron a avisar a todos los amigos de Barcelona «para que vengan para hacer un grupo de búsqueda, porque ya han pasado tres días, 72 horas».