Eva Bellido // Benicàssim
La cifra de empadronados ha aumentado en Benicàssim en 620 personas desde que el pasado 14 de marzo el Gobierno declarara el Estado de Alarma por la pandemia del coronavirus.
Éstas son las altas que se produjeron en el padrón municipal desde esa fecha hasta el 24 de agosto, según han informado desde el Ayuntamiento.
Benicàssim cuenta con un censo de alrededor de 18.000 habitantes, sin embargo, la población flotante es de aproximadamente 23.000 personas. Además, en verano, la población se dispara superando los 100.000.
La alcaldesa, Susana Marqués, explica que la actual situación derivada del covid-19 «ha favorecido que vecinos que residen todo el año en Benicàssim pero no estaban empadronados hayan tomado ahora la decisión de empadronarse aquí».
Además, muchas personas con segundas residencias en la localidad costera han optado por cambiar su empadronamiento, ya que prefieren pasar un confinamiento en un municipio costero como Benicàssim, con más zonas verdes y junto al mar.
Los empadronados en Benicàssim cuentan con varios beneficios como la gratuidad de los libros de texto en los centros públicos de la localidad, la gratuidad de la escuela infantil de 0 a 3 años, precios especiales para los festivales de música o los descuentos del 50% para los mayores en las actividades culturales y deportivas, entre otras.
La alcaldesa añade que el crecimiento oficial de la población a los 20.000 habitantes repercutiría directamente en una mejora en servicios como la educación pública, la sanidad o el transporte público, entre otros.