Redacción // Benicàssim
Ya lo han confirmado. El Gobierno ha determinado la muerte de la joven vila-realense Andrea Carballo en Benicàssim como un caso de violencia de género, tras recibir todos los informes realizados sobre el caso.
El accidente mortal tuvo lugar el pasado 23 de diciembre, cuando el vehículo que conducía la ex pareja de Andrea impactó contra el surtidor de una gasolinera de la N-340, causando el fallecimiento de ambos jóvenes, así como de un perro, que viajaba con ellos en el coche, un Volkswagen Golf rojo.
La Policía Nacional había investigado el accidente como un presunto caso de violencia machista desde el principio, y es que la joven, de 20 años, había denunciado pocos días antes a su ex novio, quien había intentado atropellarla y al que impusieron una orden de alejamiento de 200 metros.
Vila-real se volcó este domingo en apoyo a la familia de Andrea Carballo en una multitudinaria manifestación a la que acudieron familiares, amigos y vecinos vestidos de violeta y que llenaron la plaza Mayor para pedir “justicia” por la joven fallecida.
Por su parte, El Ayuntamiento acogió ayer, también, un acto en el que se guardó un minuto de silencio para manifestar el rechazo y más absoluta repulsa por el nuevo caso de violencia de género.