Parece una historia ya escrita la de los próximos tres años de legislatura sobre la guerra entre las administraciones dirigidas por distinto signo político. El aperitivo que demuestra la tendencia son los POYS y el acelerador lineal. Hace pensar que los siguientes meses será una disputa constante sobre quien tiene que pagar aquello que financian los castellonenses. Está historia adelantada, por los dos casos mencionados, aunque sea anunciada y no genere sorpresa entre los que estamos al servicio público, lo que si genera es indignación entre los miembros de Ciudadanos que no entendemos como los mayores perjudicados por estas guerras partidistas continúan siendo los vecinos de Castellón.
Parece haberse instaurado entre los miembros del bipartidismo que el dinero de la GVA es del bipartito y los recursos de la Diputación son de los populares. Nada más lejos de la realidad. Los ciudadanos son quienes sufragan estos servicios y no quieren ni desean que unas instituciones secuestradas por el bipartidismo acaben frenando o dilatando las inversiones que mejorarían los servicios de la provincia.
Desde nuestro partido hemos defendido y defenderemos que no pueden ser los ciudadanos quienes paguen los platos rotos de las continuas discusiones de si “lo paga Ximo o lo paga Moliner”. Debates largos y aburridos que no hacen otra cosa que aumentar la desconfianza de los castellonenses en la política viendo como unos por otros, la casa sin barrer. Ciudadanos no gobierna en ninguna de las administraciones, y desde esa posición neutral defiende una visión más práctica y eficiente de los recursos poniendo en valor el consenso y la eliminación de duplicidades que solo generan retrasos en la toma de decisiones políticas sobre servicios que repercuten en el bienestar general. Dejémonos pues de debates absurdos que no llegan a ninguna parte y pongamos como objetivo inmediato solucionar los problemas que afectan a nuestros vecinos. Algo evidente, pero que parece que algunos no tienen claro todavía para que fuimos elegidos en las pasadas elecciones.