E. Bellido // Benicàssim
Benicàssim debate estos días cuándo se colgó el mapa de los Països Catalans en el IES Violant de Casalduch y quién era el responsable del centro tras reclamar el Ayuntamiento su retirada.
Dos partidos, PP y PSPV, se culpan de forma cruzada. Por un lado, el portavoz socialista, Miguel Alcalde, manifestó ayer en un comunicado: «El plano que ahora tanto les molesta fue colocado en 1999, durante el primer gobierno de Eduardo Zaplana al frente de la Generalitat, como muy bien les podrá informar al respecto el vicepresidente de la Diputación, Vicent Sales, que ya entonces era profesor de este instituto».
«Sales fue director entre los años 2001 y el 2004 y, por lo que se ve, no le debió parecer mal que fuera adoctrinador, porque lo mantuvo en su lugar y no ordenó la retirada», añadió Alcalde.
Al respecto, el popular aseguró a este periódico: «Nunca lo vi en los nueve años que estuve en el centro, ni mientras fui profesor, desde 1998 hasta el 2007, ni como directivo. Y si estaba, no a la vista». Según le han trasladado, el documento podría llevar allí unos 10 años, desde que se instauraron las aulas temáticas, cuando se optó por colocarlo en la clase dedicada al valenciano.
Por aquel entonces, el máximo mandatario era el actual director territorial de Educación, Robert Roig, que estuvo al frente del Violant entre el 2004 y el 2015.
Sales afirmó que en este tema «hay que dejar de marear la perdiz con el año en que se puso y quitarlo, porque se trata de algo ilegal y adoctrinador».
Mientras, Alcalde remarcó que hay que dejar «a la directora y a la comunidad educativa que tomen la determinación». Y subrayó que es «un mapa lingüístico», tal y como defiende también Joan Bonet, de Compromís.
Desde Ciudadanos piden «celeridad en la investigación y llegar al fondo».