Héctor Lobo // Benicàssim
El afamado director Sam Mendes nos propone un drama humano de alto calado en medio de la barbarie y el caos de la Primera Guerra Mundial. Volvemos a las trincheras, el barro y el horror de títulos esenciales como Senderos de gloria, de Stanley Kubrick.
Mendes, ya con una filmografía de prestigio a sus espaldas: American beauty (1999), Camino a la perdición (2002) o Revolutionary road (2008), se ha embarcado en un proyecto muy ambicioso técnicamente, al decidir contarnos la historia en un único plano secuencia, simulando las distintas tomas que permiten la continuidad, tal y como hizo Hitchcock en aquella película titulada La Soga.
Esta forma de narración consigue que la película resulte una trepidante y estremecedora experiencia, que atrapa al espectador desde las primeras imágenes y no lo suelta hasta el final.
Nos identificamos con los protagonistas, sentimos su miedo como nuestro, notamos el paso del tiempo, la geografía de los lugares de paso.
La historia narra el heroico calvario de dos tipos muy jóvenes del ejército inglés con una misión suicida: abandonar las trincheras y salir a campo abierto para avisar a los suyos de que los alemanes han fingido una retirada y preparan una fuerte contraofensiva.
Dos intérpretes muy jóvenes, Georges MacKay y Dean-Charles Chapman llevan el peso absoluto en esta película, arropados por lo mejorcito de los actores ingleses de la actualidad.
El resultado final, más allá de la proeza técnica, es una película con el aroma clásico de lo artesanal; angustiosa y sorprendente. Una cruda oda al antibelicismo, que más que nunca debe verse en pantalla grande.
¡Nos vemos en el cine!
VIERNES 21 FEB
DE 2020 22:30 H. V.o.s. castellano
SÁBADO 22 FEB DE 2020 22:30 H.
SÁBADO 22 FEB DE 2020 19:30 H.
