Redacción // Benicàssim
El proyecto de remodelación de la plaza de la Almadraba de Benicàssim ha sido presentado a un concurso de la Diputación Provincial llamado Plan Cerámico de Regeneración Urbana. «El objetivo es que se convierta en una zona singular y moderna donde se ponga en valor el uso de la cerámica», ha indicado el Ayuntamiento.
El proyecto remodelará una superficie de 4.477 metros cuadrados, donde antiguamente se situaba la Casa de la Almadraba, donde también estuvieron los jardines de Jorge Comín y donde la tradición popular del municipio designaba la zona como «el Limbo”.
“El proyecto que queríamos para la plaza de la Almadraba queríamos que fuera participativo, es decir, fruto de un concurso de ideas que aportara la máxima innovación y modernidad. Ahora, esta convocatoria de la Diputación lo puede hacer posible y con una mejora: que Benicàssim vuelva a ser escaparate público de la cerámica de la provincia, como un referente de nuestra industria provincial más puntera”, ha señalado laalcaldesa, Susana Marqués.
El concejal de Urbanismo, Carlos Díaz, ha explicado que el «Ayuntamiento pone a la obra una serie de condicionantes como son el respeto del arbolado existente la salvaguarda de los desagües de pluviales y estación de bomberos y otros servicios. Porque, ante todo, debemos mantener la calidad de vida de los vecinos y la calidad del agua de la playa”.
Pero, además, habrá otros elementos que también deberán respetarse como que “toda la plaza deberá ser accesible, se deberán incorporar y mantener el máximo número de plazas de aparcamiento para personas con movilidad reducida y la plaza deberá contar con un sistema eléctrico que siga los requisitos municipales de máxima eficiencia energética», ha añadido el edil.
A partir de esa serie de requisitos mínimos, quienes concurran al concurso de ideas tendrá libertad para poder diseñar la plaza y los elementos que contenga y que incluso podrían ser otras dotaciones ciudadanas, siempre bajo la creatividad de los redactores y con el condicionante de utilizar como material de valor, la cerámica.
La alcaldesa ha señalado que “tras haber realizado el proyecto de innovación en cerámica de la calle Torre Sant Vicente, sabemos que para un municipio como Benicàssim, la cerámica es un material más que idóneo porque por su resistencia, belleza y utilidad, así como confortabildiad, puede ser una buena solución para lugares con alto índice de afección de agentes externos, como sucede al lado del mar, donde la resistencia de la cerámica es un valor añadido”.
La obra parte con un presupuesto de 430.000 euros, aunque el presupuesto final y su financiación dependerá del resultado del plan provincial, según ha informado el Ayuntamiento.