E. Bellido // Benicàssim
El Ayuntamiento de Benicàssim ya ha enviado las notificaciones a todos los propietarios del recinto de festivales para proceder a su expropiación.
En concreto, son cerca de 40 los dueños con parcelas en este amplio recinto y los representantes municipales ya han mantenido reuniones con cerca de una decena de ellos, para explicar de forma más cercana todos los detalles, según explica el concejal de Urbanismo, Carlos Díaz.
De este modo, los propietarios están empezando a recibir la carta con los documentos, que incluye una ficha individualizada del terreno en cuestión a expropiar con el valor de las construcciones existentes y la correspondiente indemnización por el valor tasado. Desde su recepción, tienen un plazo de un mes para la presentación de alegaciones.
El DOGV publica el proyecto de expropiación
Además, el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) publicó este miércoles la información pública del proyecto de expropiación por tasación conjunta –que fue aprobado por un pleno el pasado mes de enero– para la adquisición de estas parcelas incluidas en el Plan Especial para obra pública en terrenos destinados a festivales, aprobado en 1998 y en el 2017 para calificación de zona de uso recreativo-deportivo, y que suman alrededor de 130.000 m2.
El consistorio también se ha ofrecido a comprar a los interesados el suelo próximo que se queda fuera de la expropiación (alrededor de 100.000 m2), entendiendo que queda inutil ya para cultivos. Los dueños pueden solicitar la venta de esas parcelas al mismo precio.
Unos 12 euros por metro cuadrado
Los informes encargados por el Ayuntamiento han determinado pagar 12,14 euros por m2, por lo que el coste total de las parcelas pertenecientes al plan especial y susceptibles de ser expropiadas ascenderá a cerca de dos millones de euros, teniendo en cuenta los gastos pertinentes.
El consistorio sacará a concurso la solicitud de un préstamo bancario de 3,6 millones de euros para poder hacer frente a la adquisición definitiva del suelo de los festivales.
Díaz considera que el justiprecio está “bien valorado”. Para determinar la cuantía se encargaron dos estudios por vías distintas, según recordó. “Por un lado, uno agrícola, ya que estos terrenos están calificados como rústicos, un ingeniero agrónomo realizó una valoración teniendo en cuenta el mejor cultivo posible, que, en este caso, ha sido el naranjo clementino”.
Y, por otro, la capitalización de rentas referente a las actividades que se realizan en el recinto de festivales. Para ello, se han tomado las distintas cuentas anuales de las sociedades que allí explotan el recinto, se han obtenido los beneficios netos y se han capitalizado. “Y por esta vía da un precio más elevado y es el que se ha escogido”, afirma.
Algunos propietarios presentarán alegaciones
No obstante, algunos propietarios ya han manifestado que no están de acuerdo con el precio establecido y con la valoración efectuada, por lo que ya adelantan que presentarán alegaciones y que recurrirán al tribunal de expropiación.
Independientemente del proceso con el tribunal de expropiación, tras finalizar el periodo de alegaciones y resolverse las que se estimen oportunas, se citará un acta de ocupación y pago y las parcelas pasarán a ser de titularidad municipal.
Con todo, el Ayuntamiento espera tener la disposición del suelo de los festivales para el verano, antes de la celebración del FIB y del Rototom.
Para el Sansan, que se celebra en abril, todavía está en vigor el contrato anual de alquiler que se firmó el pasado año, aclara el concejal.