Eva Bellido // Benicàssim
Vecinas de Els Terrers de Benicàssim denuncian a este periódico el estado de “abandono” de esta playa de Benicàssim.
Según manifiestan, la orilla “está llena de algas y no te puedes ni meter a bañarte”. Una situación que, según señalan, lleva así desde la pasada Semana Santa. “Han limpiado todas menos la nuestra y pagamos la contribución igual que los demás”, indican.
Estas afectadas, la mayoría personas mayores de entre 70 y 80 años, explican que no se pueden introducir en el agua, ni ellas ni sus nietos, “porque nos hundimos y resbalamos con las algas”.
Además, inciden en que se sientan con sus sillas bastante alejadas de la orilla “porque cerca no se puede estar y por el fuerte olor que producen”.
Las vecinas informan que ya han llamado “muchas veces al ayuntamiento” para trasladar esta situación, pero que su reclamación “sigue sin ser atendida”. “Estamos casi a mitad de junio, en el arranque del verano, y nada”, lamentan.
Se trata de la zona de playa con piedras, próxima al restaurante Botavara, según especifican. “Casi todos los años tenemos que pedir cosas, es la gran olvidada”, declaran. “Somos personas mayores que no podemos desplazarnos a otra playa”, añaden.
Piden también mejor accesibilidad
Al mismo tiempo, aprovechan para advertir que la rampa de acceso a esta playa también dificulta el paso de las personas mayores.
“Las demás las han hecho de cemento, menos ésta, que está con barro y arena y te resbalas. Tenemos que cruzar por la del Botavara para poder salir bien, nos vemos obligadas a pasar por ahí aunque esté lleno de comensales”, señalan.
Por este motivo, piden al consistorio adecuar tanto los accesos a la playa como al mar en la orilla, para mejorar la accesibilidad.
Desde el Ayuntamiento se ha trabajado en los últimos meses en la adecuación de las playas para el inicio de la temporada, con máquinas que limpian, rastrillean y oxigenan la arena.
También se han retirado grandes cantidades de algas que se acumulan tras los temporales. Pero en el caso de la playa Els Terrers un gran volumen de algas continúa en la orilla, impidiendo el acceso al mar para el baño, especialmente para las personas mayores o los niños.