Eva Bellido // Benicàssim
Los okupas que permanecen instalados en los pisos del edificio próximo a la plaza de Los Dolores de Benicàssim han sido absueltos en los correspondientes juicios.
El motivo ha sido que «la parte denunciante (Sareb) no compareciera en las vistas», según confirmaron fuentes del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), por lo que se dictaron sentencias absolutorias en los procedimientos por delitos leves de usurpación de vivienda que se les achacaban, por los que habían sido denunciados.
Todas las propiedades ocupadas ilegalmente en el bloque en cuestión, situado en la calle Bad Salzdetfurth, pertenecen a la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria, la Sareb (el conocido como el banco malo), que se estaba encargando de comercializarlos para su venta.
Pero ningún representante de este organismo se presentó a los cuatro juicios celebrados, uno por cada vivienda ocupada, en el Juzgado de Instrucción Número 1 de Castellón. El primero fue el pasado 19 de julio y no pudo llevarse adelante por no comparecer nadie de la Sareb. Los otros tres restantes estaban convocados para el 29 de septiembre y tampoco pudieron celebrarse por no asistir la parte denunciante.
Sin embargo, los okupas sí asistieron a estos juicios.
«Ya no hay ningún proceso en marcha que dé la esperanza de que se pueda resolver la situación y restaurar la normalidad»
Declaran vecinos del barrio
Vecinos del barrio manifiestan su preocupación, advirtiendo de la situación de desamparo en la que se quedan ahora. «Ya no hay ningún proceso en marcha que dé la esperanza de que se pueda resolver la situación y restaurar la normalidad. Quedamos avocados a que el Ayuntamiento pueda interferir, como institución tiene muchas más opciones de definir acciones que resuelvan la situación, para no tener para siempre un edificio ocupado en el centro del pueblo».
Al parecer, actualmente son cuatro las casas que hay ocupadas ilegalmente en esta finca, respecto a las siete que llegó a haber en febrero, de las 11 existentes seminuevas en el edificio, que fue asaltado en enero, pese a contar con una puerta antiokupas.
Estos pisos no cuentan con luz ni agua, lo que ha podido provocar que algunos hayan abandonado las viviendas y que no se haya ocupado el edificio entero. La comunidad no tiene suministros de alta, por lo que las viviendas no pueden obtener el servicio, tras varios intentos fallidos. Además, las compañías tomaron acciones para que no pudieran hacerlo de forma ilegal.
El caso de este edificio ocupado en pleno centro del casco urbano se suma a otro que también se produjo en el mismo mes de enero, en una villa adosada de la avenida Mohíno, que fue resuelto.
Reforma del Código Civil
Vecinos de esta zona de Benicàssim piden mejoras legislativas en cuestión de ocupación ilegal de viviendas como la de Cataluña, que reforma el Código Civil para que los Ayuntamientos y comunidades de vecinos puedan instar a desalojar una vivienda ocupada.
La medida está dirigida solo a los casos en los que el propietario no actúa, como la Sareb y empresas o fondos con numerosos inmuebles. Incluso contempla sanciones de hasta 90.000 euros para los que no atiendan a requerimientos por inmuebles ocupados con actividad delincuencial.