Eva Bellido // Benicàssim
La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) ha adjudicado la redacción del proyecto de adecuación ambiental y mejora de la inundabilidad en la marjalería del Cuadro de Santiago de Benicàssim por un importe total de 117.021,33 euros (iva incluido).
La CHJ sacó a licitación el estudio, a través del Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, por un presupuesto base de 260.047,38 euros (214.915,19 euros más 45.132,19 de iva).
La redacción del proyecto ha sido adjudicada finalmente a la empresa Evren Evaluación de recursos naturales SLP, tras resultar ser la firma mejor puntuada de las 20 empresas que se habían presentado, tal y como publicó este periódico. La adjudicataria obtuvo una puntuación total de 95 puntos y fue la oferta económicamente más ventajosa, con una baja de 143.000 euros.
De todas las compañías presentadas, todas participaron en el proceso a excepción de una que se quedó fuera por baja temeraria. La mayoría son especializadas en materias como la ingeniería, el agua y el medio ambiente.
La redacción del estudio tiene un plazo de ejecución y entrega de 12 meses, según especificaba el anuncio de licitación. El objetivo es licitar un informe que determine de qué manera se puede compatibilizar la zona urbana, con alrededor de 800 viviendas consolidadas, con la húmeda, tras la declaración de esta zona como de especial protección, sin que suponga un riesgo de inundación grave. En concreto, se pide, a la empresa adjudicataria, la aportación de tres soluciones distintas con sistemas hidráulicos.
El Ayuntamiento de Benicàssim estaba a la espera de una mesa de trabajo con todas las partes implicadas, la Conselleria de Medio Ambiente, la CHJ y la Dirección General del Agua, tras conocer que el proyecto que hizo hace más de 10 años la Dirección General del Agua de canalización del barranco de la Parreta es actualmente incompatible con el humedal y para ver quién debía encargarse de hacer uno nuevo.
El proyecto de la Parreta se efectuó a raíz de la exigencia del Patricova a Medio Ambiente de solucionar los problemas al considerarlo de prioridad alta por riesgo de inundaciones. Sin embargo, lleva más de una década sin hacerse realidad a pesar de las reivindicaciones constantes tanto de los vecinos de los sectores 5 y 6 como del Ayuntamiento de Benicàssim.