Redacción // Benicàssim
La alcaldesa de Benicàssim, Susana Marqués y la concejala de Bienestar Social, Vanessa Batalla, se han reunido con los representantes de las principales organizaciones no gubernamentales de la localidad.
El objetivo del encuentro ha sido «poner en común los diferentes proyectos que están ejecutando entre la sociedad benicense y así coordinar esfuerzos y aumentar la oferta de atención y ayuda a las familias y personas con más necesidades o necesidades especiales», ha explicado la alcaldesa.
De este modo, entidades como San Vicente de Paúl, Cáritas o Cruz Roja, que ahora ya cuenta con nuevo local social en el municipio, discriminarán proyectos que se dupliquen y podrán destinar sus esfuerzos a aquellas personas o áreas donde haya alguna carencia no cubierta.
Proyectos sociales
En esta coordinación también se implican los programas sociales municipales. Así, una vez, realizado el primer paso, de puesta en común de todas las actividades, se podrán activar proyectos sociales, que hasta ahora no existan y que ampliarán la cartera de recursos que el municipio ofrece a las personas que tengan alguna necesidad específica.
Batalla ha señalado que las ong’s «con sede en el municipio están haciendo una labor encomiable, atendiendo a las familias que pasan por un mal momento, distribuyendo material y comida de primera necesidad».
«Pero además, también ofrecen otro tipo de atención, como talleres formativos o asesoramiento o asistencia que muchas veces se desconocen y hay que poner en valor y coordinarlo para no duplicar recursos y sí diversificar y ampliar en aquellos sectores o necesidades sociales que no estén cubiertas».
Los servicios que ofrece por ejemplo la asociación San Vicente de Paúl son el reparto de alimentos, clases de repaso para niños de primaria, tareas de ropero solidario y taller de corte y confección y de cocina.
Cáritas se ocupa de la acogida, de gestionar y asesorar a las familias sobre cómo llevar una casa o de negociar facturas o pagarlas ( luz, agua, alquiler), ayudas para gafas, médicos, farmacias; también reparto de alimentos en algunos casos. Y además, poseen una red de empleo denominada Empresas con corazón.
Y, por su parte, Cruz Roja, recién llegada con sede a Benicàssim, como tiene un abanico más amplio de proyectos está valorando desarrollar en el municipio aquellos donde pueda existir mayor necesidad por parte de la sociedad local. Puede ser el caso de programas dirigidos a personas mayores, fracaso escolar, o drogodependencias.
Mejor coordinación
Tras la reunión, las diferentes entidades sociales participantes se han dado un plazo de varias semanas para coordinarse e iniciar este nuevo curso con un proyecto social más unido en el municipio.
Además, como ha recordado Batalla, «este tipo de coordinación es similar al que se desarrolla durante la campaña de Navidad».
«Entonces, para evitar las duplicidades que se estaban dando en la donación de alimentos a las familias con necesidad, se ha logrado que cada entidad se organice y se especialice en un tipo de material. Así al final, las familias pueden tener todo lo que necesiten y sin duplicar esfuerzos».