SOCIEDAD Nueva escultura
EVA BELLIDO // BENICÀSSIM
Un paellero gigante y con historia. Es que el ya adorna una de las entradas más importantes a Benicàssim con una escultura en la rotonda de acceso sur al municipio, por la CV-149, próxima a la playa.
La alcaldesa de la localidad, Susana Marqués, inauguró ayer junto al concejal de Obras y Servicios (también escultor), los diputados de Turismo, Andrés Martínez y José Pons, y el vicepresidente de la Diputación, Francisco Martínez, entre otros ediles de la corporación municipal, la placa del monumento que ahora acompaña a la ciudad, rindiendo homenaje a una de sus fiestas más famosas y características, el Día de las Paellas, reconocido, además, como de Interés Turístico Provincial.
Unas puertas junto a la paella “abren las puertas de Benicàssim para recibir a todos los visitantes que vienen a disfrutar de este festividad”, que cada año atrae a más de 20.000 personas, cocinándose en la calle alrededor de un millar de paellas, según explicó Martín hablando del sentido que se ha tratado de dar a la escultura que ha sido confeccionada por la brigada municipal.
El paellero, además, no es uno cualquiera. Ha sido donado amablemente por el empresario hostelero dedicado a las comidas monumentales Pepe Becerra, quien indicaba ayer a este periódico que con esta gigantesca sartén ganaron el Guinness a la fideuá más grande en el 94 (12.560 raciones) y a la mayor tortilla en el 97 (23.400 raciones). Un premio parecido al que pretende aspirar Benicàssim pronto buscando el récord de paellas cocinadas al mismo tiempo.
El paellero mide cinco metros y medio y data del año 91, utilizándose para la Magdalena. Marqués destacó que la actuación se ha llevado a cabo “con recursos propios del Ayuntamiento y pretende continuar en la línea del equipo de gobierno de mejorar la imagen de la localidad turística con pequeñas obras que no supongan un gran desembolso económica, así como con el mantenimiento del municipio y sus infraestructuras”.