SUCESOS Fuerte temporal
EVA BELLIDO // BENICÀSSIM
La fuerte tromba del domingo dejaba también una gran huella en Benicàssim, donde se recogieron hasta 126 litros de agua a causa de las intensas lluvias, según los datos que ofreció la alcaldesa, Susana Marqués, tras la visita que realizó a las zonas más afectadas junto al concejal de Obras y Servicios, Clemente Martín.
“Aunque las bombas municipales han estado funcionando 24 horas sin descanso las circunstancias medioambientales han hecho que algunas zonas de la parte sur del municipio por su específica orografía se hayan visto afectadas por la tromba de agua”, explicó Marqués.
Quien declaró que desde el consistorio “estamos trabajando con celeridad para que el municipio recobre la normalidad, el domingo la brigada ya repartió vallas y la policía cortó tres calles».
Estos tres viales, Camí la Ratlla, Maestro Chapi y Betxí, continuaban cerrados al tráfico este martes, registrándose una estampa muy poco habitual en zonas como el humedal del Cuadro de Santiago lleno de agua o el torrente del barranco de Farja. Los bomberos también actuaron en diversas incidencias registradas en el municipio.
Para reforzar la actuación, se han “habilitado 15 personas de la brigada que, junto a dos tractores, dos camiones y una pala, están, por una parte, limpiando el arrastre de las piedras que se ha producido en la avenida Barranquet y en algunos barrancos, y por otra, abriendo vías naturales de escape del agua en la zona del Cuadro de Santiago”, según indicó Martín.
La primera edila destacó que las estaciones de bombeo “en las zonas de Blaumar, Coviles, Ferrandis Salvador y Delicias, que desalojan el agua que recogen las alcantarillas de las calles al mar o a la depuradora, llevan funcionando desde el domingo por la tarde a destajo, dado el ritmo de lluvia que se produjo entre las 15.00 y las 22.00 horas”. También efectivos de la brigada municipal están retirando todo el material de arrastre que se ha producido todo el fin de semana con motivo de la gran afluencia de agua torrencial de los barrancos.
Aunque los vecinos de estas zonas del Cuadro de Santiago continúan reivindicando mejoras que contribuyan a paliar y dar solución a los múltiples problemas que suelen sufrir cada vez que se dan fuertes lluvias.
TESTIMONIOS // Fueron muchos los vecinos que este domingo padecieron las inclemencias del tiempo y que tuvieron que achicar agua de sus casas. En un primer piso del pueblo, en la calle Mossen Oliveres, tuvieron que sacar más de una veintena de cubos de agua tras haberse inundado la terraza y entrar por toda la casa de dos pisos.
En Leopoldo Querol, una planta baja con patio también se llenaba de agua al sobrepasarse la capacidad del alcantarillado. Entre cuatro personas de la familia estuvieron achicando agua tres o cuatro horas.
Otros se quedaron todavía más sorprendidos cuando al levantarse de la siesta este domingo, en su vivienda en la zona de Mohino con Gran Avenida, resbalaron con el agua que ya medía dos dedos en la planta casa de la casa. Y es que el agua había salido del váter y del plato de ducha.