SOCIEDAD Comercios
E. BELLIDO // BENICÀSSIM
Comercios de la calle Salinas de Santa Pola de Benicàssim, junto a la Gran Avenida, denuncian un “considerable descenso de ventas” desde que hace alrededor de dos años se cambiara el sentido de circulación de una calle. Así lo explica Mónica Pozo, de la tienda de animales Mundo Mascota, quien afirma que debido al “cambio de dirección de la calle, que antes se podía acceder desde la Gran Avenida y ahora se tiene que dar toda la vuelta” están “perdiendo clientes”. Pozo señala que, de hecho, “dos establecimientos han cerrado ya, una parafarmacia y una papelería, y traspasaron sus negocios”.
La responsable de la tienda de artículos para animales lamenta que percibe “entre 20% o un 30% menos de clientes”. Y reclama que se pueda volver a entrar a este vial comercial y residencial desde la Gran Avenida, argumentando que, además, “la calle paralela hacia Castellón es de doble sentido, no hay aceras, los coches aparcan fuera de las casas, y es muy complicado el acceso y la circulación, hay niños que corren por allí”. Plantea hacerla de una dirección y esta de doble sentido. “Siempre ha sido de doble sentido”, dice. También señala que ha presentado escritos en el Ayuntamiento manifestando esta problemática con el objetivo de hallar una solución.
La alcaldesa, Susana Marqués, explicó que el cambio de dirección se decidió cuando se puso en funcionamiento la escoleta infantil próxima “para evitar colapsos y ganar fluidez a la hora de dejar los niños en la escuela y evitar peligrosidad”. No obstante, “estamos abiertos a estudiar cualquier posibilidad que se pida por parte de los vecinos como hemos hecho en muchas calles de varias zonas, después de los estudios necesarios que avalen la necesidad”. “Estamos dispuestos a reabrir el estudio y ver las posibilidades no solo que permitan la apertura de nuevos negocios sino también garantizar sobre todo las entradas y salidas del colegio de una forma segura y adecuada”, aseveró.