Eva Bellido // Benicàssim
El ambiente festivo de Sant Antoni en un día, además, tan señalado como el de las Paellas se ha sumido en una profunda tristeza por la pérdida de Tomás Alejandro Tárrega, Tomaset, conocido ganadero de Benicàssim y todo un referente en el mundo de los toros de la provincia.
Tomaset ha fallecido este viernes, a los 67 años, tras una larga enfermedad, lo que ha provocado una fuerte consternación en todo el municipio, especialmente entre los aficionados taurinos.
Muy querido por su personalidad bondadosa, era una figura a seguir por todos los amantes de los toros, muchos iniciándose en esta afición con su influencia.
Sus vacas, de la famosa ganadería que tenía en la carretera del Desert, eran fijas en los festejos taurinos de las fiestas, tanto en estas de enero como en las de septiembre de Santo Tomás, hasta que se jubiló.
El ganadero local recibió innumerables homenajes en el verano del 2016 en los pueblos donde llevó sus toros y cómo no también en Benicàssim, donde se siente por él una gran admiración y no podía ser menos.
En la jornada de su ganadería en las fiestas se le hizo entrega, en el descanso de los toros de la tarde por parte de las reinas, de un diploma enmarcado por su trayectoria y también un jamón, tan típico en el mundo taurino. Además, se le entregó a su hermana un ramo de flores, dado que siempre estaba muy pendiente de él.
Tras su jubilación, desarrolló labores ayudando como mayoral en la ganadería de Manolo Beltrán, en su última etapa, hasta que la enfermedad se lo impidió, porque los toros para él eran más un hobby que un trabajo.
También era habitual verle con sus mansos en actos tan tradicionales como la Coqueta, como siempre se le recordará.
Su despedida será este sábado, que es cuando se realizará el entierro en la iglesia de Santo Tomás, a las 16.00 horas, con sus familiares y seres queridos.
Por este motivo, y dadas las circunstancias, la Concejalía de Fiestas del Ayuntamiento ha decidido retrasar el festejo taurino de la tarde, que suele comenzar a las 16.30, a las 17.00, con la finalidad de que los aficionados taurinos puedan acudir al entierro y después a los toros en la plaza, donde se le realizará un especial y merecido homenaje.
El concejal de Fiestas, Arturo Martí, explica que la «mayoría de los niños de este pueblo de mi generación si nos gustan los toros o tenemos alguna relación es, en parte, por Tomás».
Además, que no era un simple ganadero, era una persona muy emblemática del pueblo, todo el mundo le quería; allá donde iba con el manso, los niños le hacían preguntas y se prestaba siempre a todo y tiene la estima de todo el pueblo. Cuando se jubiló teníamos que devolverle un poco del cariño que le tenemos».
Hasta siempre Tomaset. D. E. P.