E. Bellido // Benicàssim
Un palomar de Benicàssim ha sido escenario de un nuevo robo. El afectado ha presentado una denuncia en la Guardia Civil notificando el hurto de hasta 15 palomos de competición, que se encontraban en jaulas de estas instalaciones.
El suceso se produjo por la noche, con la sustracción de ejemplares jóvenes, según relató el responsable de estos animales. «Entraron e hicieron un agujero por arriba. Por una de las rejillas de ventilación. El que se introdujo por este espacio tuvo que ser alguien muy pequeño y delgado», según explicó este aficionado.
«Esta es la colombicultura que tenemos en Castellón y en la Comunitat Valenciana, en nuestra región», según indicó el denunciante. «A ver qué hacemos ahora desde la federación», señaló. Y es que no es la primera vez que sufren robos de palomos de competición en este y otros palomares. Tras la denuncia, la Guardia Civil también estuvo ojeando.
Los hechos ocurrieron en un palomar situado en las proximidades del parque natural del Desert de les Palmes y de la zona de acampada de los festivales, donde hay alrededor de un centenar de estos ejemplares de competición pertenecientes al Club del Barranco de Benicàssim, del que forman parte varios vecinos.
Tienen un valor económico, pero sobre todo sentimental, según puntualizan estos aficionados.
Hace aproximadamente dos años también se produjo un robo de medio centenar de palomas. Han padecido varios hurtos. «Rompían la puerta, entraban dentro y se llevaban los pichones (los palomos jóvenes), pero últimamente también cogen las hembras», señalaron desde el Club del Barranco. Una agrupación cuyo nombre se debe a la proximidad del barranco de Farcha.
Desde la formación explicaron que los robos suelen producirse cuando empieza la temporada, que es de noviembre a diciembre, con los primeros concursos de Navidad y comarcales.
Desde la Asociación de Colombicultura también recordaron otros hechos de hace años cuando arrancaron la cabeza de palomas.
El mismo afectado también denunció el pasado mes de noviembre el disparo de varios ejemplares, que aparecieron muertos presentando una herida en el pecho de escopeta de perdigón. Un hecho que sí que era la primera vez que ocurría y que lamentaron.
«Es muy raro por allí, ya que, aunque la zona está dentro del coto de caza, prácticamente se considera reserva por estar muy cerca de la carretera. Los cazadores allí no suelen tirar, se van más hacia dentro», indicaron a este diario desde la Asociación de Colombicultura del municipio.
Los aficionados piden más vigilancia
Los aficionados a las palomas de competición piden más vigilancia en las zonas donde se encuentran los palomares. Y es que, tras hechos ocurridos en los últimos años como robos y el disparo de algunos ejemplares, tienen una gran preocupación.
Ahora, justo en la temporada, es cuando más incidentes se registran. Creen que con una mayor presencia de equipos especializados de la Guardia Civil como el Seprona podría estar todo más controlado, lo que quizás evitaría que se produzcan más sucesos de estas características, como cuando se lamentaron la vida de varios ejemplares.
Les gustaría contar con una mayor protección que les de tranquilidad, pues han sufrido varios robos en los últimos años, el último hace dos meses en otro palomar.