Redacción // Benicàssim
El Consell «ha asumido que tiene que pagar el resto de la deuda pendiente con Benicàssim correspondiente a Villa Elisa» y que «asciende a 118.591,26 euros», según han informado desde el Ayuntamiento, tras haber recibido un escrito del abogado de la Generalitat en referencia al recurso municipal presentado.
«La persistencia del equipo de gobierno del consistorio de Benicàssim defendiendo los derechos de la ciudadanía a recibir todo el dinero que se adeudaba por Villa Elisa ha recibido sus frutos», han declarado.
La alcaldesa, Susana Marqués, se ha congratulado por la noticia. «Esto demuestra que siempre hay que defender los derechos de los ciudadanos y, en estos momentos, era un derecho de Benicàssim que, después de haber sufrido una década de paralización de la obra y de haber soportado que no se hubiese pagado el compromiso económico del dinero que había avanzado el ayuntamiento, era de ley que se nos devolviera íntegramente la deuda».
Como ha explicado Marqués, el impago de las certificaciones de obra y los gastos derivados de la restauración de Villa Elisa por parte del gobierno valenciano ascendía a 1.529.952,43 euros».
«En un primer pago y, cuando el Ayuntamiento y la Diputación dieron un paso adelante para rescatar Villa Elisa y poderla restaurarla, fue cuando la Generalitat abonó un pago parcial de esta cantidad, en concreto 1.411.361,17 euros, sin embargo, se olvidaron de pagar el resto», recordaron.
«Ahora, con la justicia en la mano, se ha demostrado que el consistorio que representa a todos los benicenses, tenía razón y que la Generalitat pague también los 100.217,65 euros que el Ayuntamiento tuvo que pagar en concepto de intereses de demora de la deuda de obra y los 18.373,61 euros que también pagó a la empresa Arción SL como consecuencia de la resolución del contrato de obra. En total 118.591,26 euros que la Generalitat ahora, por fin, pagará», concluyó Marqués.
Enhorabuena, por cobrar. Vaya, lo que en 10 años no pagaron los suyos se lo han pagado en unos meses esos a los que tanto critica y desprestigia. Esos «holgazanes» parece que trabajan incluso por Benicàssim, pidiendo que no se dejen más de lado las prioridades.
Ahora veremos cuántos años tarda más la depuradora, que está pendiente desde 2010-2011 con siete años solicitada al gobierno central, y las salidas norte del municipio, y los trenes de cercanías, y la liberación de la AP-7…