Redacción // Benicàssim
El festival Rototom Sunsplash abre un año más su recinto de conciertos en Benicàssim (Castellón)a la cocina del mundo y traslada a la mesa la interculturalidad y la fusión que integran su filosofía. Cuarenta propuestas gastronómicas configuran el menú de esta edición, que aterriza del 16 al 22 de agosto.
El público tendrá a su alcance durante siete jornadas platos de cuatro continentes. Etiopía, Senegal, Marruecos o Costa de Marfil acercarán la cocina africana, mientras de América llegan los puestos de restauración de Perú, Cuba, Jamaica o Argentina.
La gastronomía asiática viajará por Tailandia, Japón e India y Europa tendrá su representación con las propuestas de Italia, Alemania, Grecia y España.
Todas ellas perfilan un interesante viaje de experiencias y sabores para descubrir, a través de la cocina y los fogones, la idiosincrasia y riqueza de cada país.
Novedades de este año
La cocina tradicional de los pueblos andinos de América Latina, con la oferta de papas a la huancaína o choclo con queso fundido que acercará Saberes de la Pachamama; la apuesta por la tradición del aperitivo y el picoteo a base de pintxos vascos y vermut casero de la taberna El Ultramarinos, con sede en el histórico y marinero barrio del Cabanyal (València), o las sabrosas salchichas de otra taberna, esta vez alemana.
Se suman a este restaurante al aire libre otras propuestas ‘de la tierra’: arroces con sabor mediterráneo, salazones, mariscos y pescados; tapas y helados artesanos.
También habrá cocina vegana, biocrepes vegetarianos, repostería saludable y zumos de frutas de Vegetarian Lover’s, copas y cócteles naturales.
Completan el viaje gastronómico de Rototom Sunsplash los puestos de cerveza artesanal. Tres propuestas cerveceras con alma de la mano de Castelló Beer Factory y Cannabeer, de Castellón y Segorbe, respectivamente, y la murciana Yakka.
Castelló Beer Factory regresa al festival con premio bajo el brazo. Su Golden ha ganado recientemente la medalla de oro en estilo ‘Blonde Ale’ en el concurso Barcelona Beer Challenge 2018, al que se presentaron más de 1.000 cervezas de 250 cerveceras de todo el mundo, “por lo que consideramos que es un gran logro”, explican desde la firma.
Este año repite con Golden y también con Happy Hoppy (‘Indian Pale Ale-IPA’), Sant Rock (‘Belgian Dubbel’), Engendro (‘American Pale Ale’) y 964 Porter (‘English Porter’), pero además incorpora una nueva versión de la Mic Mango (‘Fruit IPA’ con una gran cantidad de mango) y como novedad la Jano-Hop, una ‘Session New England IPA’, afrutada, densa, de baja graduación y muy sabrosa.
Desde Segorbe (Castellón) y con presencia ya en una decena de países, tras abrir mercado en Suiza, Costa Rica y México, aterriza la cervecera Cannabeer, pionera en la elaboración de cerveza artesanal con cáñamo, el ingrediente estrella en todas sus recetas.
Tres de ellas ponen la directa hacia el Rototom Sunsplash con el objetivo de conquistar paladares: La Original (‘Brown Ale’), cerveza tostada con toques a pan horneado; La Dorada (‘Blonde Ale’) una rubia con sabor intenso a fruta exótica como mango y maracuyá y La Imperial (‘IPA’), tostada con matices rojizos y doble malta con toque de cítricos.
Cannabeer visita también el festival con ranking de premios. Los dos últimos del pasado mes de mayo a la Mejor Cerveza con Cáñamo y al Mejor Producto de Alimentación con Cáñamo en la Expocáñamo en Sevilla.
Dos galardones que afianzan a la firma como la marca de cerveza artesana con cáñamo más premiada, tras sumar seis reconocimientos, cuatro de ellos en la feria referente del sector, Spannabis.
El podio cervecero lo corona Yakka, de Murcia, con nueve referencias fijas y otras tantas que rotan dependiendo de las colaboraciones y ediciones especiales que van surgiendo.
Entre ellas, la Mare Nostrum Ale (‘Golden Ale’), rubia, fresca y mediterránea, ideal para acompañar un bocadillo de calamares junto a un acústico de guitarra.
También la Humo Saison Smoke, cerveza de trigo, rubia y de burbuja intensa y con un toque ahumado sutil pero persistente o la tostada German Ale Bio, con cereales y lúpulo de cultivo ecológico y muy combinable con una degustación de quesos al atardecer.
Como los que se sucederán del 16 al 22 de agosto y a ritmo de reggae en Benicàssim.