SOCIEDAD Solidaridad
E. BELLIDO // BENICÀSSIM
La asociación San Vicente de Paúl de Benicàssim está atendiendo, a lo largo de este 2015, a alrededor de 150 personas necesitadas del municipio, prestándoles ayuda con alimentos y productos de primera necesidad desde los locales de la entidad, según informaron desde la agrupación. La asociación solidaria puede dar servicio a estas familias en situación de riesgo gracias a los fondos que obtiene, entre los que se encuentra los pertenecientes a la subvención que recibe del Ayuntamiento, que este año ha sido ampliada hasta los 7.000 euros (5.000 anteriormente), según señalaron las mismas fuentes. El convenio se firmó en el Ayuntamiento, con la alcaldesa, Susana Marqués, el pasado 20 de febrero, y el nuevo presidente de la asociación, Tomás Guinot, según recordaron desde la entidad.
Una cantidad que ha servido, principalmente, para la adquisición de alimentos “que no nos vienen de Europa y para así poder equilibrar la bolsa de la compra, como huevos, carne y demás productos frescos, no perecederos que son los que ya llegan de Europa”, explicó Alfredo Marqués, desde San Vicente de Paúl.
Además, la entidad caritativa presta apoyo en otras necesidades fundamentales como la educación, realizando clases de repaso para ayudar a niños de familias con falta de recursos a hacer los deberes, en su local situado en la calle Santa Águeda.
Mientras, el reparto de alimentos y el servicio de ropero se presta desde el otro centro ubicado, en la actualidad, en la carretera del Desert de les Palmes.
Cáritas es la otra gran oenegé que opera en Benicàssim atendiendo también a un gran número de familias con carencias en la localidad. Ambas componen las mesas de solidaridad que está convocando el Ayuntamiento para coordinar y optimizar los recursos.