CULTURA Festivales de Música
EVA BELLIDO // BENICÀSSIM
Miles de fibers tomaron ayer Benicàssim dispuestos a disfrutar, a pesar de la incertidumbre en torno a la celebración del evento musical prácticamente hasta última hora, de su festival preferido, el FIB. La localidad se convierte estos días en la Gran Bretaña mediterránea, pisada por los más fieles asistentes, principalmente ingleses, que han llegado, igual que cada año, como atraídos por un imán y en marabunta.
Ni el concurso de acreedores de Maraworld (empresa organizadora del FIB), ni los contratiempos en el montaje y las numerosas dificultades que ha atravesado el popular certamen ‘indie’ esta vez, les ha frenado para reservar su billete y volar hasta la Costa Azahar y enloquecer con unas vacaciones de música, sol y playa. En concreto, son alrededor de 10.000 los que se han aposentado ya.
Las zonas de acampada también comienzan a tomar color, especialmente del rojo de los torsos británicos recién llegados y sus chillones atuendos, que no pasan para nada desapercibidos allá por donde van. El camping, ya está a punto, según informaron fuentes de la organización, a pesar de haber comenzado los trabajos en las instalaciones más tarde que nunca.
Y en el recinto, todo empieza a tomar forma y finiquitarse las tareas principales, como los escenarios, que están a punto de culminarse, o las diversas carpas, áreas y servicios del festival, únicamente quedando pendiente otros aspectos, de electricidad, sonido, entre otros.
Aunque finalmente se ha prescindido de alguna parte de la zona de acampada, por no lograr el acuerdo con su propietario, según ha podido saber este diario, y no disponer tampoco de una zona de parking habitual de la zona de acampada CampFest, el recinto donde se aposentan los fibers es considerable.
Y hasta el jueves está prevista la llegada de miles y miles de fibers más que aterrizarán ya de cara al fin de semana en la localidad costera para ver en vivo y en directo a algunos de sus ídolos musicales.
The Killers, Queens of The Stone Age, Beady Eye y Arctic Monkeys, son los cabezas de cartel de este FIB ’13, marcado también por la venta del 65% del festival, por parte de su propietario Vince Power, a dos potentes promotores de festivales europeos, queriendo así garantizar su continuidad.