PSPV // Benicàssim
Nos tienen acostumbradas, siempre ponen en tela de juicio a la mujer. No dejan que la igualdad se haga visible y les parece desproporcionada cualquier acción en pos de la puesta en relieve de los derechos femeninos.
El lunes 26 de marzo lo volvieron a hacer. Ciudadanos, PP y ARB votaron por dejar sobre la mesa un asunto de urgencia para todas las mujeres, las de Benicàssim y las de fuera. Saltó a la palestra la votación de establecer una serie de puntos lila en la ciudad durante la celebración de festivales.
El verano pasado tuvimos que lamentar un hecho repugnante, asqueroso, doloroso y espeluznante que puso el nombre de Benicàssim en la diana de las agresiones machistas y de la violencia contra el cuerpo femenino: una violación en los días en que se celebraba el FIB. De esto, obviamente, no tiene la culpa el FIB ni el Ayuntamiento, pero quizás entre todas pudiéramos haber hecho alguna cosa.
En el verano el Partido Socialista de Benicàssim presentó una moción para establecer protocolos de prevención de agresiones machistas. Se nos contestó que éramos oportunistas, unas demagogas y rastreras por reivindicar estas medidas disuasorias.
Ahora lo han vuelto a hacer; les piden que establezcan unos puntos seguros para las mujeres. De esa manera, cualquiera que estuviese en una situación crítica –persecución, tocamientos, acoso verbal, u otro tipo de acción contra la integridad femenina– podría acudir a pedir ayuda de la policía o de otras personas que la ayudaran a protegerse.
Pues no, la respuesta ha sido que la política de igualdad de nuestro ayuntamiento es muy buena, que todos los meses hacemos acciones de autosatisfacción y reivindicación de nuestros derechos con la boca pequeña, que ponemos un hexágono morado recordando que a las mujeres no nos gusta que nos peguen ni que nos violen. Suponemos que a los hombres tampoco les gusta que los violen y les peguen. ¿Llevan por eso un distintivo masculino contra esa anomalía social? Pues así estamos, anomalía sobre anomalía. Si ya no es normal que las mujeres se tengan que reivindicar iguales, encima se tienen que defender de la inoperancia y autocomplacencia de otras mujeres.
Vergonzoso que alcaldía, concejalía de igualdad y cuarto partido político en el ayuntamiento, todos representados por mujeres, vetaran el establecimiento de mayores medidas de seguridad en las fechas de celebración de festivales. Sí, seguridad para todas y para todos, porque si las mujeres estamos salvaguardadas de los depredadores machos, también lo están los hombres normales.
En fin, otro punto negativo, tanto contra la convivencia pacífica y la igualdad que se gana la derecha local. Parece mentira que haya tanta mujer en sus filas.